lunes, junio 23

Rally Cañete: Un retorno Neto



[Para seguir viendo los Slide, pulsar la equis (x) superior derecha]

Luego de mucho tiempo Neto Jochamowitz se re-encuentra con el primer puesto de la general de un rally, tras luchar con los rivales que desde el año pasado están tras su legado: Fuchs y Orlandini en la N4.


Orlandini nos tiene acostumbrados a un manejo derrochante de espectacularidad, pero esta vez la caja no le aguantó y abandonó antes de la mitad del rally. Por lo que la pelea se centró en Fuchs, Neto y Pardo.


Parecía que sería otra carrera ganada por el piloto de Vision Center, pero bajó una llanta en el PE5, que lo relegó al tercer lugar de la general. Faltando un último especial, Neto debía mantener el liderazgo y Pardo conservar el segundo escaño del podio. Entre los dos primeros había casi 1' de diferencia y Fuchs estaba respirándole la nuca a Pardo, a 23", cuando se largaría el PE6.


El ímpetu de Fuchs no pudo esta vez con sus anhelos y así Cañete terminaba, con Neto primero, Pardo a 1'08" y Fuchs a 1'56" del puntero.


En la categoría camionetas, Lucho Mendoza en su enorme y de dos toneladas Toyota FJ, ganaba solito tras el abandono del gran Luchón Alayza, que se quedó en el PE2 tras golpear la rueda delantera izquierda de su Forester contra un pequeño puente angosto de cemento que cruzaba una acequia. El resto de la carera fungió de banderillero en ese lugar para alertar a los demás pilotos del obstáculo doble: el puente y su Subaru. Un banderillero de lujo.


En la N2 el buen Tito Panizio se imponía con el Swift amarillo, que estrenaba un nuevo color de la suerte. Segundo quedaba Fabián en su Gol y tercero Velit en el Accent automático, que por cierto andubo muy rápido.



En la "categoría del futuro", la N3, Brandes hizo volar al Cerato y a Sierlecki le faltó pista para darle caza, aún así, hizo también volar al León. Cerraba el podio el Chubi Zani en su Corolla, que logró ganarle a Valerga en el Mazda 3. Raúl Velit regresaba a los trazados con un Suzuki SX4, pero sólo pudo llegar 7mo y último en esta categoría.


En la N4 light, Abuid se imponía con su Impreza sobre Párraga y Cataño, ambos montados en sendos Lancer. En la Super1600 Luchito Alayza regresaba a lo más alto del podio de su categoría. En verdad, Luchito ya está para otra cosa, un reto mayor, maneja muy bien y sería lindo verlo pelear con los N3. Y cerrando las categorías, Luis Otiura ganaba la Turismo Superior y hacía lo propio Barten en la de Tubulares.

Saltos:


Carrera aparte:
El rally se desarrolló bien, había gente en la ruta por su proximidad a Lima y la otra mitad eran locales. Los mapas que se repartieron podrían ser mejores, es difícil encontrar los puntos de referencia, pero siempre hay alguien a quién preguntar. Incluso dos camionetas del ACP, con los ceros en sus laterales equivocaron la ruta, pero el público siempre atento los volvió al camino.



El peor espectáculo lo dio un espectador que se rebajó a algo peor que un miserable imbécil (con el perdón de ellos), tras lanzar una piedra contra la luna lateral de una combi que, por despistada o falta de algo, se había metido a la ruta de la competencia. La gente en el lugar, tras abuchearla le indicaron donde estacionarse. Cuando la combi, con la familia del chofer dentro incluyendo mujeres y niños pequeños, circulaba para salir de la ruta sucedió el piedricidio contra la ventana.


Lo peor es que la gente del lugar, quienes se sintieron ofendidos por esta acción, lo pensarán dos veces cuando se quiera organizar otra carrera o actividad similar en su localidad. Una pena. No entiendo cómo pueden haber personas de tan inferior nivel intelectual y es que no hay justificación para la violencia. Pensaba que nosotros, los amantes de los autos, los fabricantes de adobes con la boca por comer tierra, éramos un grupo de personas selectas, tocadas por una gracia especial que nos hacía diferentes a todos los demás hinchas. Mi globito fue reventado con una pedrada.


Paralelamente a la competencia y tal cual sucede con las principales categorías en otras partes del mundo, los lugareños habían preparado una carrera de cuadrillas, a manera de exhibición y donde resultara ganador un piloto de la localidad de Quilmaná conocido con el seudónimo de Ben Hur, gracias a la fuerza de sus 3BP (Burro Power) de potencia, calzados para la ocasión con pezuñas anchas y provistos de escapes de carrera. En segundo lugar llegó una piloto de la categoría "Mulas", que a pesar de contar con una sola acémila, le hizo difícil la victoria a Ben. Lamentablemente fue arrojada a los leones, como pasó con todos los demás participantes que quedaron detrás de Hur y nunca sabremos su nombre. El deleite fue del público.




Cañete en imágenes:


No hay comentarios.: